sábado, 5 de julio de 2008

El pirata de las manos de tijeras


En estos días ajenos a mí no tengo mejor cosa q ofrecerles q un cuento

El pirata nació en los Estados Unidos y su sueño fue ser cantante. Sin embargo, su verdadero camino lo encontró surcando el mar del séptimo arte mientras actuaba. Los primeros años navegó entre pesadillas en Elm Street mientras su matrimonio naufragaba en sus narices. Esto poco importó, ya que pronto su barco llegaría a la isla del Nunca Jamás y entre pésimos directores, excéntricos amantes del chocolate y asesinos de jinetes sin cabeza su viaje nunca terminó. Pronto, un segundo largo viaje, lo convertiría en una leyenda. El tercero, lo consagraría. Nadie fue tan admirado y deseado como el pirata torpe y egoísta del barco fantasma. Sin duda, su talento lo llevó lejos para nunca volver. El pirata que asesinó con sus manos de tijera no estuvo loco, fue un artista. Aún lo es. Incomprendido, solo y ensimismado divaga entre sus sueños y sus realidades. Un día decidió ser barbero, pero la muerte lo volvió asesino. Dicen que muy pronto se casará, pero, al barco, jamás lo dejará. Como todo capitán, tuvo muchas mujeres. En cada puerto una distinta; desde ladronas y drogadictas hasta francesas tan soñadoras como él. Por supuesto, si se casa, lo hará con la francesa, con la que tiene ya dos hijos. Si tuviera que predecir el futuro, diría que el excéntrico pirata morirá en un sueño. El sueño eterno de la fama que alcanzó con la libertad de su talento. Ya que, el talento sin libertad no existe. Y el pirata cantará entre seres inmortales por el resto de su vida, aunque sepa actuar y no cantar.


Un pirata sexy!





Excéntrico y talentoso ¿se puede pedir más?





Johnny Depp








1 comentario:

El Ovejo dijo...

Ke chevere!

Aunque me hallan tenido podrido con piratas del caribe, realmente admito admirar a Depp!

Salud2!
El ovejo!